Para preparar los scones, hay que comenzar mezclando la harina tamizada, la levadura, la mantequilla fría y la sal en una picadora. Enciende la máquina para obtener una masa con una consistencia similar a la arena. Esta técnica se llama chorro de arena. Con la picadora en movimiento, agrega el azúcar, los huevos y la leche, hasta que la mezcla se desprenda de las paredes del recipiente y se haya mezclado bien. 

Pasa todo el contenido a una superficie enharinada y amasa rápidamente (un minuto como máximo) para dar la forma de un rectángulo aplastado; envuélvelo en papel film y déjalo reposar en el frigorífico durante media hora.

Saca la masa del frigorífico y extiende la masa con un rodillo sobre una superficie enharinada, que quede una masa con unos 3cm de grosor. Ahora, usando un recipiente de 6-7 cm de diámetro, corta la masa en discos regulares y colócalos en una bandeja de horno con papel de hornear.

Precalienta el horno a 175° durante unos 17 minutos. Cuando estén ligeramente dorados sácalos del horno: ¡listos para ser servidos!

* Puedes sustituir el azúcar moreno por azúcar blanco si prefieres un sabor más dulce y un color más claro. 

** Si vas a hacerlos para el desayuno, puedes sustituir la levadura por esencia de vainilla y añadir pasas, previamente limpiadas con agua. 

*** Puedes usar leche en polvo como sustituto de la leche.

Receta realizada en colaboración con Sonia Peronaci - www.soniaperonaci.it 

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