Irlanda: preguntas más frecuentes

Sí, Irlanda puede ser un destino estupendo para visitantes con movilidad reducida o con otras discapacidades. Muchas atracciones, alojamientos, restaurantes, pubs y empresas de transporte son accesibles en silla de ruedas y ofrecen toda una serie de ayudas y servicios a personas con deficiencias auditivas y visuales, autismo y discapacidad intelectual. Y se hacen mejoras continuamente.

Alojamiento

Muchos alojamientos ofrecen habitaciones accesibles, pero como son limitadas, conviene reservarlas con antelación. Las instalaciones varían, así que pide información a tu proveedor de alojamiento o considera la posibilidad de solicitar fotografías para saber exactamente lo que vas a tener.

Algunas instalaciones, como los castillos y los edificios históricos, tienen accesibilidad limitada por ser estructuras protegidas, pero comunícate con ellos para saber si se adaptan a tus necesidades. Un gran recurso es Disabled Friendly Hotels, que incluye consejos de viaje y una lista de más de 50 hoteles de la isla de Irlanda, recopilada por Philip Quinlan, de Spinal Injuries Ireland.

Transporte

Aquí tienes algunas opciones. Puedes alquilar un vehículo para tu estancia. Motability Ireland ofrece vehículos aptos para sillas de ruedas y coches automáticos adaptados para que puedas empezar tu viaje por carretera por Irlanda desde el primer momento.

Puedes contratar a un guía/conductor privado para que te enseñe los alrededores, dándote la oportunidad de sentarte y disfrutar de las vistas. Puedes reservar todo tu viaje a través de un operador turístico especializado en viajes accesibles, que se encargará de todo, desde la planificación del itinerario hasta el alojamiento y el transporte.

También puedes utilizar la red de transporte público de Irlanda para explorar la isla. En general, los autobuses son accesibles para usuarios de sillas de ruedas y personas con movilidad reducida. Los trenes, incluido el tren de cercanías DART de Dublín, tienen espacios designados para pasajeros con discapacidad, al igual que el sistema de tranvía Luas de Dublín.

Sin embargo, es posible que algunas estaciones no sean accesibles, por lo que deberás planificar tu ruta y comprobar que se adapta a tus necesidades. También se pueden reservar taxis accesibles en silla de ruedas.

Transport for Ireland y Translink en Irlanda del Norte tienen mucha información útil sobre accesibilidad y transporte público por la isla. Y puedes utilizar TFI Journey Planner para ayudarte a planificar.

Qué ver y hacer

Desde populares atracciones turísticas y acogedores pubs hasta playas doradas y tranquilas vías verdes, hay muchas cosas que ver y hacer en tu viaje por Irlanda. Aunque aún quedan mejoras por hacer, cada vez son más las experiencias que garantizan su accesibilidad a las personas con discapacidad. Sin embargo, siempre es una buena idea comprobar la accesibilidad antes de la visita llamando con antelación o consultando en Internet.

Y recuerda...

Si necesitas ayuda o consejo antes o durante tu viaje a Irlanda, no tengas miedo de pedirlo. ¡La gente estará más que encantada de ofrecer toda la ayuda que pueda! Para más consejos, hay algunos recursos excelentes en nuestra página Accesibilidad en Irlanda.

Sí, muchas de las principales atracciones turísticas de Irlanda son accesibles para usuarios de sillas de ruedas y visitantes con discapacidad, lo que significa que todo el mundo puede disfrutar de lo mejor que ofrece la isla.

Si te interesa añadirlo a tu itinerario por Irlanda, te sugerimos que consultes su sitio web. Muchas atracciones disponen de información detallada sobre los servicios y ayudas que ofrecen, como mapas sensoriales, guías visuales, guías en braille, aparcamientos accesibles y entrada gratuita para visitantes discapacitados y sus cuidadores. Hemos elegido solo algunas de todas las islas...

Es imprescindible visitar el Trinity College de Dublín para contemplar el famoso Libro de Kells. Podrás disfrutar de un recorrido totalmente accesible por el campus del siglo XVI antes de vivir la experiencia inmersiva del Libro de Kells.

Los aficionados a la historia encontrarán tres sedes del Museo Nacional de Irlanda en la ciudad, todas ellas accesibles en gran medida en silla de ruedas y con ayudas audiovisuales y audioguías.

Ninguna visita a Dublín estaría completa sin una parada en la Guinness Storehouse, hogar de la famosa cerveza negra de Irlanda. Toda la experiencia es accesible en silla de ruedas, incluido un grifo accesible para que puedas servirte tu propia pinta de Guinness. También se ofrecen gratuitamente dispositivos de guía de texto, audio y lengua de signos internacional, así como mapas sensoriales.

Si vas a Belfast, el Titanic Belfast es un lugar estupendo que hace honor a la orgullosa posición de la ciudad como cuna del Titanic. El edificio es accesible en silla de ruedas y hay audioguías y guías con lenguaje de signos a disposición de los visitantes con discapacidad visual o auditiva.

Otras opciones estupendas son El Museo Ulster, el MAC arts centre y Crumlin Road Gaol, todos los cuales ofrecen una serie de ayudas a los visitantes con necesidades especiales.

Una de las atracciones más populares de la isla de Irlanda es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, la Calzada del Gigante, en la costa norte.

El centro de visitantes cuenta con una serie de características de accesibilidad que lo hacen apto para usuarios de sillas de ruedas y personas con movilidad limitada. Hay un bucle de inducción para las personas con audífonos y audioguías para las personas con discapacidad visual. The Green Path es accesible en silla de ruedas y ofrece impresionantes vistas de las icónicas formaciones de piedra.

Otros lugares estupendos para visitar son el Tour del estudio de Juego de Tronos, donde las instalaciones accesibles y el personal especialmente formado garantizan que todo el mundo pueda disfrutar de la experiencia y las famosas murallas de la ciudad de Derry~Londonderry, a las que pueden acceder los usuarios de sillas de ruedas mediante una rampa.

Esta ruta turística costera recorre la escarpada costa occidental de Irlanda, ofreciendo espectaculares vistas del mar en casi cada curva. Muchas de sus impresionantes playas ofrecen ahora sillas de ruedas y aparcamientos accesibles.

Encontrarás recorridos accesibles en barco a lugares únicos, como Skellig Michael y los emblemáticos acantilados de Moher que ofrecen una experiencia excelente a los visitantes con discapacidad. El mirador es accesible en silla de ruedas y también hay sillas de paseo eléctricas disponibles para las personas con movilidad reducida.

No te pierdas la experiencia Beyond the Trees Avondale, en el condado de Wicklow, donde el paseo por las copas de los árboles y la torre mirador son totalmente accesibles para los usuarios de sillas de ruedas.

Si vas a visitar la Roca de Cashel, en el condado de Tipperary, es posible que tengas que ponerte en contacto con el personal con antelación para garantizar el acceso.

La impresionante tumba de pasadizo megalítica conocida como Newgrange, en el condado de Meath, tiene un centro de visitantes totalmente accesible con exposiciones inmersivas, pero el acceso a la tumba de pasadizo en sí está limitado debido a la naturaleza del monumento.

El río Shannon fluye por los Corazones Ocultos de Irlanda y una forma encantadora de experimentarlo es hacer una excursión en barco. De hecho, puedes embarcar en el Viking Tours boat en Athlone (ponte en contacto con el personal con antelación para organizarlo) y navegar río abajo hacia el importante monasterio del siglo VI de Clonmacnoise.

Puede que este lugar no sea adecuado para sillas de ruedas o personas con movilidad reducida, ya que el terreno puede ser accidentado, pero el centro de visitantes es accesible en silla de ruedas y dispone de guías audiovisuales.

La visita a la destilería de whiskey de Tullamore D.E.W. es totalmente accesible y te dará una gran idea del rico patrimonio destilador de la isla de Irlanda.

Si tienes un presupuesto limitado para tus vacaciones en Irlanda, no te preocupes: no importa el tipo de alojamiento que busques, puedes encontrarlo a buen precio por toda la isla.

En primer lugar, los albergues son siempre una buena opción para los viajeros con poco presupuesto. Irlanda cuenta con un montón de estupendos albergues repartidos por toda la isla, así que tanto si te vas de escapada a una ciudad como si haces un viaje rural por carretera, no hace falta que te gastes el presupuesto en alojamiento.

La mayoría de los albergues ofrecen habitaciones privadas (algunas con baño privado) si no te atrae la opción del dormitorio. Pero tendrás que reservar con antelación para evitar decepciones.

Dependiendo de la época del año en que viajes, puedes plantearte acampar. Si montas tu tienda en uno de los muchos campings panorámicos de la isla, podrás mantener bajo control tu presupuesto de alojamiento y, además, estar tan cerca de la naturaleza como puedas desear.

Irlanda es justamente famosa por sus B&Bs (bed & breakfasts), que ofrecen una cálida bienvenida irlandesa que encanta a los visitantes. Encontrarás B&Bs por toda la isla y de todos los precios, de una a cinco estrellas, así que seguro que encuentras algo que se adapte a tu bolsillo.

El alojamiento con cocina es otra opción a tener en cuenta, sobre todo si viajas con otras personas, ya que puedes dividir el coste entre el grupo. De nuevo, encontrarás opciones que van desde el lujo de gama alta a lo barato y alegre. Muchos también admiten mascotas, lo que resulta útil si viajas con la mascota de la familia.

No des por sentado que los hoteles están fuera de tu alcance solo porque tienes un presupuesto limitado. Suelen ser más asequibles de lo que imaginas, sobre todo fuera de temporada. Fíjate en la clasificación por estrellas (de una a cinco) para hacerte una idea del rango de precios.

Y consulta con los hoteles para ver si tienen alguna oferta, como escapadas entre semana o descuentos por reservar varias noches.

En pocas palabras, la gran demanda y la escasez de oferta han provocado un aumento de los precios del alquiler de coches en Irlanda. Pero esto no tiene por qué hacer mella en tus planes de vacaciones, porque es fácil pasar unas vacaciones estupendas en Irlanda sin coche.

Puedes utilizar el sistema de transporte público de Irlanda (autobuses, trenes, tranvías) para explorar la isla, ahorrando costes y reduciendo tu huella de carbono.

Los trenes son un medio estupendo para viajar entre ciudades y pueblos grandes.

Los autobuses te ayudarán a salir un poco más de los caminos trillados, ya que prestan servicio a pequeños pueblos y comunidades rurales.

El sistema de tranvías de Dublín, conocido como Luas, es estupendo para moverse por la ciudad.

Los sistemas urbanos de bicicletas compartidas también son muy útiles para moverse por ciudades como Dublín, Belfast, Cork, Galway y Limerick.

Hablando de ciclismo, mucha gente combina alquiler de bicicletas con transporte público en sus vacaciones en Irlanda. Solo tienes que tomar el tren o el autobús hasta el destino que elijas y después alquilar una bicicleta para que puedas seguir explorando a tu ritmo. Hay muchas empresas privadas de alquiler de bicicletas que ofrecen una amplia gama de bicicletas, incluidas bicicletas eléctricas.

Otro consejo útil es buscar operadores privados que organicen visitas guiadas a las atracciones turísticas más populares. Esta es una forma sencilla de ver los lugares de interés.

Visita el sitio web de Transport for Ireland, donde encontrarás toda la información que necesitas para moverte por Irlanda, incluido un planificador de viajes e información sobre tarifas.

Dónde alojarse, dónde comer, qué ver y hacer y cómo ahorrar: tenemos algunos consejos estupendos para vivir Irlanda con un presupuesto ajustado.

Puedes optar por hostales económicos y B&Bs para ahorrar unos euros. El alojamiento con cocina también es estupendo para grupos grandes, ya que pueden dividir los gastos. Y consulta también los hoteles, pues a menudo hay ofertas para estancias más largas y entre semana.

Tenemos una guía estupenda para salir a cenar con poco dinero en Irlanda, que abarca desde la comida callejera y los picnics hasta las ofertas para madrugadores y la comida de pub.

Evita los elevados costes del alquiler de coches optando por el transporte público y aprovechando la red de autobuses y ferrocarriles de Irlanda para salir a explorar.

Las tarjetas de viaje como la iLink en Irlanda del Norte, la Leap Visitor Card en Dublín y condados circundantes y la Belfast Visitor Card ofrecen grandes ahorros en viajes, así como descuentos en visitas y entradas a atracciones populares y ofertas en tiendas y restaurantes.

Descubre los lugares que puedes visitar ¡totalmente GRATIS! Numerosos museos, galerías de arte y bibliotecas de la isla ofrecen increíbles experiencias culturales que no te costarán ni un céntimo.

Los recorridos autoguiados a pie te permiten explorar a tu ritmo y sin gastar.

Y la naturaleza siempre es gratis, tanto si vas a visitar a los ciervos residentes en el Phoenix Park de Dublín, como si sigues las rutas de senderismo por la impresionante Ruta Costera de la Calzada o te sumerges en las vigorizadoras aguas del océano Atlántico en una playa de arena de la Ruta Costera del Atlántico.

En cuanto al entretenimiento, puedes disfrutar del ambiente único de un pub irlandés, a menudo con una sesión extra de música tradicional por el precio de una bebida.

Las entradas de teatro suelen tener un precio razonable en Irlanda, sobre todo en los teatros más pequeños y regionales y también puedes buscar precios con descuento para los preestrenos.

Si vienes en época de festivales (que es prácticamente todo el año en Irlanda), a menudo podrás asistir a actos gratuitos, talleres, conciertos, etc., así que merece la pena que prestes atención a lo que se organiza durante tu estancia.

La respuesta es sencilla: depende del lugar desde el que viajes.

La mayoría de la gente necesita un pasaporte válido para entrar en la República de Irlanda e Irlanda del Norte y muchos necesitarán también un visado, pero hay excepciones:

Los ciudadanos británicos no necesitan pasaporte ni visado para viajar a la isla de Irlanda, ya que tanto el Reino Unido como Irlanda forman parte de la Zona de Viaje Común. Sin embargo, necesitarán una identificación oficial con fotografía.

Los ciudadanos de la UE (así como los de Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein) pueden viajar a la isla de Irlanda (incluida Irlanda del Norte) sin pasaporte ni visado siempre que lleguen y salgan de la República de Irlanda.

Solo necesitarán un documento nacional de identidad. Sin embargo, esos ciudadanos necesitarán pasaporte si viajan a Irlanda del Norte o si viajan a Gran Bretaña desde Irlanda del Norte.

Los viajeros del resto del mundo necesitarán un pasaporte válido para viajar a la isla de Irlanda. La necesidad de visado dependerá del lugar desde el que viajes: infórmate sobre los requisitos de visado para la isla de Irlanda.

Autorización electrónica de viaje (ETA) A partir de finales de 2024, todos los viajeros (excepto los nacionales británicos e irlandeses y los residentes en Irlanda que cumplan los requisitos) necesitarán una autorización electrónica de viaje (ETA) para viajar al Reino Unido, incluida Irlanda del Norte y también para viajar a Irlanda del Norte desde la República de Irlanda.

Identificación fotográfica Las compañías aéreas y marítimas exigen algún tipo de identificación con fotografía (normalmente el pasaporte o el carné de conducir), así que comprueba SIEMPRE qué tipo de identificación te exigen en tu compañía aérea, compañía de transbordadores o agencia de viajes antes de viajar.

Puedes solicitar un visado en línea para visitar la República de Irlanda en el sitio web del INIS (Servicio Irlandés de Ciudadanía e Inmigración).

Si vienes de vacaciones o para una escapada corta (menos de 90 días), lo más probable es que necesites un visado de turista «C» para estancias cortas.

Puedes solicitar un visado en línea para visitar Irlanda del Norte en el sitio web GOV.UK.

Si vienes de vacaciones o para un breve descanso (hasta seis meses), lo más probable es que necesites un visado de visitante estándar.

No, no necesitas pasaporte para cruzar la frontera de la República de Irlanda a Irlanda del Norte y viceversa.

Sin embargo, debes comprobar antes de tu viaje si necesitas visado para viajar a la isla de Irlanda (República de Irlanda e Irlanda del Norte).

A partir de finales de 2024, todos los viajeros (excepto los nacionales británicos e irlandeses y los residentes en Irlanda que cumplan los requisitos) necesitarán una autorización electrónica de viaje (ETA) para viajar al Reino Unido, incluida Irlanda del Norte y también para viajar a Irlanda del Norte desde la República de Irlanda.

Por supuesto. La mayoría de los restaurantes de Irlanda tienen opciones vegetarianas en sus menús y muchos son aptos para veganos y para comensales sin gluten.

También tendrán información detallada sobre los alérgenos en sus menús para que tus alergias no te impidan disfrutar de una comida increíble durante tu viaje.

Cada vez son más los irlandeses que optan por una dieta basada en plantas o vegetariana, por lo que no faltan opciones a la hora de comer fuera.

En las ciudades y pueblos más grandes hay restaurantes especializados en comida vegana y vegetariana.

Pero incluso cuando te salgas de los caminos trillados, descubrirás que los restaurantes, cafeterías y pubs tienen una sorprendente variedad de alimentos adecuados, desde productos de panadería sin gluten hasta hamburguesas veganas. Si no ves algo en el menú, pregúntalo. En la mayoría de los sitios están dispuestos a complacerte.

Si estás planeando tu viaje y buscas ideas, aquí tienes algunas recomendaciones de opciones vegetarianas y veganas en Belfast, Dublín y los alrededores de Irlanda.

The Happy Cow también es un gran recurso, con cientos de restaurantes vegetarianos con datos de contacto y opiniones de los usuarios.

Empecemos por la más importante: Guinness, el producto de exportación más famoso de Irlanda, es ahora apto para veganos. Buenas noticias para quien quiera disfrutar de una pinta o visitar la Guinness Storehouse durante un viaje a Irlanda.

De hecho, verás que muchas de las cervezas artesanas, ales y sidras de Irlanda son aptas para veganos, al igual que famosos whiskys, como Bushmills y Jameson.

Así que las visitas a microcervecerías y a destilerías vuelven a estar en el itinerario.

Hacer la compra también es fácil, gracias a las secciones dedicadas en los supermercados que ofrecen una gran variedad de productos sin lácteos, sin huevo y sin gluten.

Muchas marcas populares de supermercados ofrecen ahora una gama de opciones veganas, incluidos platos preparados, pizzas y sándwiches a base de plantas. Solo tienes que buscar el símbolo vegano en la etiqueta y encontrarás muchos donde elegir.

También puedes echar un vistazo a las tiendas de alimentos saludables y no olvides pasarte por un mercado de agricultores, donde encontrarás las verduras más frescas y una gran variedad de productores de alimentos artesanos.

El sitio web Irish Vegan es un gran recurso para encontrar tiendas aptas para veganos en toda la isla.

En Irlanda hay festivales para todo y la comida vegana no es una excepción.

Visita Belfast durante el Irish Vegan Festival o acude al Veg Fest de Dublín y encontrarás lo mejor de la cocina vegana, además de charlas y talleres.

Prácticamente en cualquier lugar de la isla de Irlanda. La comida tradicional es parte integrante de la cultura irlandesa y la encontrarás en restaurantes, pubs, camiones de comida, cafeterías y mercados de abastos allá donde vayas. He aquí algunos de los favoritos de siempre:

Potato boxty: prueba en Holohan's Pantry, en Belfast, este tradicional pastel de patata.

Ternera salmuerizada: prueba el auténtico plato, servido con salsa de perejil y col verde, en Gallagher's Boxty House, en el Temple Bar de Dublín.

Estofado irlandés: Prueba en Gleeson’s of Roscommon el mejor estofado irlandés, un cuenco de cordero irlandés cocido a fuego lento, patata, zanahoria y cebada, perfecto por su sencillez.

Pescado ahumado: prueba una selección de caballa y salmón ahumados en Burren Smokehouse de Lisdoonvarna, en el condado de Clare.

Ulster Fry: un desayuno cocinado a base de bacon, morcilla, tomate, salchichas, farl de patata (pan de patata) y pan de soda (un pan tradicional). Maggie May's, en Belfast, es famoso por sus impresionantes desayunos.

Ostras autóctonas: el paraíso es media docena de ostras autóctonas y una pinta de Guinness en el Mourne Seafood Bar, en el condado de Down.

Ternera especiada: más apreciada por los irlandeses que la ternera salmuerizada (que tradicionalmente se exportaba), encontrarás esta sabrosa delicia en Tom Durcan’s stall en el Mercado Inglés de Cork.

El blaa: un panecillo fresco exclusivo de Waterford que se come mejor a media mañana relleno de bacon. Pruébalo en Walsh's Bakery, en la ciudad de Waterford.

Sopa de marisco: encontrarás versiones de la sopa de marisco irlandesa en la mayoría de las ciudades costeras, pero Nancy's Barn, en el condado de Donegal, la convirtió en la norma a batir en el Campeonato de Sopa de Marisco de toda Irlanda. Es esencial disfrutar de la sopa de pescado con el tradicional pan moreno.

Coddle: este contundente plato de salchichas, bacon y patatas es un favorito de Dublín y se sirve mejor en uno de los pubs tradicionales de la ciudad, como el Gravediggers (John Kavanagh's) en Glasnevin.

Morcilla: la morcilla negra (y blanca) se puede encontrar en todas partes, pero la receta de Clonakilty no ha cambiado desde el siglo XIX y es imprescindible probarla. Pásate por el Clonakilty Black Pudding Visitor Centre, en la bulliciosa ciudad de Cork, para probarla por ti mismo.