La península de Dingle

Encanto bohemio

Sería fácil llegar a la península de Dingle y no salir del propio pueblo de Dingle. Bohemio, artístico y verdaderamente cordial, Dingle es famoso por sus pubs-ferretería (donde puedes pedir una pinta y comprar unas botas de agua). Si vas más allá del pueblo descubrirás nada menos que 6.000 años de historia, así como la costa de Kerry con sus olas ondulantes, vientos salados, acantilados espectaculares y cielos amplios. Puedes visitar el oratorio de Gallarus, una iglesia del cristianismo primitivo con vistas a las aguas ondulantes y azules del puerto de Smerwick; la playa de Coumeenoole, con sus fascinantes vistas de las islas Blasket; y el paso de Conor, la carretera de montaña más alta de Irlanda. Aquí lo excepcional es la norma.

Skirting Slea Head

Para sacar el máximo provecho de la península de Dingle, inicia tu aventura al volante en el pueblo de Dingle, coge la espectacular y serpenteante ruta de carretera Slea Head y conduce a lo largo de la costa. Cerca de Dún Beag encontrarás el Fahan Beehive, que cuenta con una buena colección de “clochán”, casas de piedra medievales habitadas en su día por monjes. ¿Te resultan familiares estas estructuras con forma de cono? Las cabañas de piedra seca de Skellig Michael fueron el refugio de Luke Skywalker en “Star Wars: Los últimos Jedi”.

La playa de Coumeenoole es posiblemente la mejor de Kerry con sus arenas azotadas por el viento, las olas del Atlántico rompientes y las rocas negras escarpadas. Resulta todo un espectáculo y no es de extrañar que apareciera en la película “La hija de Ryan” de David Lean. En la icónica y sinuosa carretera que conduce hasta el puerto de Dunquin te aguardan más paisajes conmovedores. Aquí puedes coger un ferry hasta las desiertas y poéticas islas Blasket, el grupo de islas más al oeste de Europa.

Más allá de la costa

La costa es una presencia tan poderosa en esta parte del mundo que es fácil olvidar que la península de Dingle no se limita solo al mar. Aquí encontrarás muchas más cosas, como el paso de Conor. Este paso de montaña de un solo carril serpentea implacable desde el pueblo de Dingle hasta la bahía de Brandon. Haz una parada en la cima y disfrutarás de unas vistas impresionantes de toda la península con su terreno de montaña de color óxido, el vasto valle verde y los lagos oscuros y pequeños.

El sabor de Dingle

Sean Murphy, de Murphy's Ice cream, comparte la receta de uno de los sabores más populares de Dingle.

Una aventura en el pueblo de Dingle

Dingle es una base ideal para cualquier estancia en la península de Dingle y es probablemente uno de los pueblos más encantadoras de la isla. Las eclécticas tiendecitas de moda y joyería en Green Street ceden paso a pubs íntimos y acogedores, como Ashes y Foxy John's. Puedes disfrutar de unas magníficas tapas al estilo irlandés en Solas, la excelente cocina con el toque de Dingle de The Chart House y algunos de los mejores helados de la isla de Irlanda en la muy querida Murphy’s. Y no puedes marcharte sin visitar el bello entorno de la bahía de Dingle para ver al delfín más famoso del lugar, Fungie. Realiza uno de los recorridos en barco y vive una aventura inolvidable en el mar.