Barrios de Dublín

Probablemente uno de los lugares más famosos de la ciudad, el Temple Bar es famoso por su música maravillosa, su ambiente animado y la energía palpable que desprende. Con una historia que se remonta a tiempos de los vikingos, este vibrante barrio te permite comprender el pasado en un entorno moderno. Las calles adoquinadas bullen por la actividad, la música en vivo puede oírse desde los numerosos bares, los artistas callejeros deleitan a los transeúntes y el mercado gastronómico del sábado ofrece de todo, desde queso artesanal hasta ostras frescas. Recupera fuerzas en uno de los numerosos y pequeños cafés o pubs tradicionales y, a continuación, curiosea cuanto desees en la multitud de boutiques y tiendas de ropa vintage distribuidas por las calles.

Un centro de innovación e ingenio en pleno corazón de la ciudad, el barrio creativo se extiende desde South William Street hasta George's Street y desde Stephen Street Lower hasta Exchequer Street. El ambiente relajado que se desprende de los cafés y bares refleja la fluida cultura creativa de esta zona, que en su día fue el centro neurálgico del comercio textil en Dublín. Hoy en día, gran cantidad de diseñadores y artistas creativos han hecho suyo este barrio, y sus tiendas y galerías elegantemente decoradas están repletas de tesoros para los compradores curiosos. ¿Necesitas relajarte y descansar? Aquí también encontrarás muchas peluquerías, salones de manicura y spas. Gastronomía, compras, arte y tratamientos de belleza, ¡este es el lugar perfecto para dejar que fluya tu creatividad!

Mires donde mires descubrirás antigüedades en Francis Street. El barrio antiguo oficial de Dublín cuenta con toda una tradición de artesanos cualificados que se remonta al siglo XVIII. Lejos del bullicio de las calles comerciales de la ciudad, esta zona rebosa carácter y color. Su ambiente relajado te invita a perder la noción del tiempo mientras exploras la mezcla ecléctica de tiendas de muebles elegantes, galerías de arte lujosas, tiendas de artesanía y cafeterías. Rebusca en expositores de recuerdos y baratijas decorativas, tómate un descanso saboreando un café y un brownie y, después, ¡lánzate de nuevo!

Después de una mañana explorando el barrio antiguo, puedes adentrarte sin apenas darte cuenta en la parte más antigua de la ciudad: el barrio medieval. Aquí se encontraba el asentamiento original de Dubh Linn, que se convirtió en un centro de poder vikingo. No te pierdas Dublinia, donde las historias de vikingos y del Dublín medieval cobran vida a través de fascinantes exposiciones interactivas. A continuación, visita algunos de los edificios más históricos: la hermosa catedral de San Patricio, donde el escritor Jonathan Swift está enterrado; la Catedral de la Santísima Trinidad, un lugar de culto desde hace casi 1.000 años; y, por supuesto, el castillo de Dublín, la fortaleza medieval construida sobre un asentamiento vikingo que ha sido el punto central para muchos de los eventos más trascendentales de Irlanda.

Dublín es famoso, y con razón, por sus elegantes calles georgianas con terrazas idénticas de estrechas y altas casas de ladrillos rojos con puertas de colores e intrincadas barandillas de hierro forjado. Además, a los amantes de la arquitectura de calidad les gustará especialmente el barrio georgiano de Dublín. Desde St Stephen's Green y el Trinity College hasta el Gran Canal, aquí encontrarás algunos de los mejores edificios georgianos del mundo. El área de St Stephen's Green está repleta de casas elegantes, mientras que un paseo por Merrion Square (en su época, hogar del escritor Oscar Wilde) y Fitzwilliam Square te transportará a una época pasada. Una joya de la corona georgiana de Dublín es Leinster House, en Kildare Street, sede del Parlamento irlandés. Originalmente construida en 1745 por el conde de Kildare, se dice que inspiró el diseño de la Casa Blanca.

¡Adiós a lo antiguo y bienvenido lo nuevo! Visita el área de “Silicon Docks” en Dublín y adopta el espíritu de “trabajar mucho y divertirse más” propio de este vibrante distrito. Este barrio animado y elegante, en el que todo gira en torno al Grand Canal Dock, ha emergido recientemente de las sombras de su pasado industrial para acoger a prestigiosas empresas internacionales como Facebook y Google. Aprovecha su ubicación ribereña para divertirte practicando un poco de paddle surf. O bien opta por la vida nocturna y visita el maravilloso Bord Gáis Energy Theatre para disfrutar de un espectáculo en vivo y unas copas en la azotea del lujoso The Marker Hotel. 

The Liberties es el auténtico “Dublín antiguo”, una zona justo al suroeste del centro de la ciudad que en su día fue famosa por su próspera industria textil, los concurridos mercadillos y las destilerías de whiskey. Ahora, como punto neurálgico para las empresas tecnológicas y digitales, vibra con una nueva energía. Además, está bendecida con maravillosas atracciones, como el campanario más alto de la ciudad en John’s Lane Church y The Fumbally, un café peculiar que sirve comida deliciosa y café recién hecho. Por supuesto, ninguna presentación de Liberties estaría completa sin una mención a Guinness. La emblemática cerveza irlandesa se elabora justo aquí, en St James's Gate. Visita la Guinness Storehouse, donde puedes servirte tu propia pinta perfecta, descubrir la historia de la famosa “cerveza negra” y relajarte en el fabuloso Gravity Bar, donde podrás disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad.

El lugar perfecto para acabar tu visita a Dublín es el distrito de Dame, que conecta los barrios georgiano, cultural y medieval. Durante el día, es un animado laberinto de calles repletas de cafeterías y boutiques. Por la noche, se desmelena y se transforma en un paraíso para los amantes de los clubs y el teatro. ¿Un día perfecto en el distrito de Dame? Date el capricho de degustar los deliciosos pasteles del Queen of Tarts Café, compra hasta caer rendido en tienda pequeñas y curiosas, relájate con una comida a la luz de las velas en el galardonado Pichet Cocktail Bar and Restaurant y, después, toma asiento y déjate llevar por el esplendor del Olympia Theatre, donde puedes disfrutar de todo tipo de espectáculos, desde monólogos humorísticos hasta danza tradicional irlandesa. ¡Una forma perfecta de disfrutar de la ciudad de Dublín!